Toma fuerza la
idea de la vuelta de Michael
Jordan
al mundo del basket. Una idea alimentada por los medios de
comunicación, que recuerdan que el 17 de febrero de este año 2013
cumple 50 años. Y el propio mito de los bulls alarmó al
subconsciente mundial con siglas NBA cuando afirmó, en su retirada,
que no le desagradaba la idea de volver a ponerse de corto a los 50.
Todo esto es motivo suficiente para que volvamos a 1988, justo hace 25 años, cuando Jordan tenía 25. La NBA gozaba de un esplendor maravilloso, con los Ángeles Lakers, los Detroit Pistons y los Boston Celtics como mejores equipos del mundo. Llegó el All-Star celebrado en Chicago el 7 de febrero. Jordan jugaba en casa y el espectáculo estuvo a la altura de la calidad de los participantes.
El Este presentaba uno de los quintetos más espectaculares de siempre: la fórmula que no falla, talento+fama+espectáculo+ganas. El timón lo dirigía a la perfección Isiah Thomas, el base de los Pistons, el cerebro que abastecía de pases a Jordan y al resto del equipo. 15 asistencias y 8 puntos. A su lado, Michael Jordan, MVP del partido. 29 minutos, 40 puntos, (17 de 23 en tiros de 2 puntos y 6 de 6 en los libres) y 8 rebotes. Un vendaval ofensivo con efectividad, pero eso sí, espectacular también en defensa: 4 robos y 4 tapones (máximo del partido).
El equipo jugó para el lucimiento de Jordan |
Todo esto es motivo suficiente para que volvamos a 1988, justo hace 25 años, cuando Jordan tenía 25. La NBA gozaba de un esplendor maravilloso, con los Ángeles Lakers, los Detroit Pistons y los Boston Celtics como mejores equipos del mundo. Llegó el All-Star celebrado en Chicago el 7 de febrero. Jordan jugaba en casa y el espectáculo estuvo a la altura de la calidad de los participantes.
Magic, Jordan, Olajuwon y Moses Malone. De los mejores de la historia |
El Este presentaba uno de los quintetos más espectaculares de siempre: la fórmula que no falla, talento+fama+espectáculo+ganas. El timón lo dirigía a la perfección Isiah Thomas, el base de los Pistons, el cerebro que abastecía de pases a Jordan y al resto del equipo. 15 asistencias y 8 puntos. A su lado, Michael Jordan, MVP del partido. 29 minutos, 40 puntos, (17 de 23 en tiros de 2 puntos y 6 de 6 en los libres) y 8 rebotes. Un vendaval ofensivo con efectividad, pero eso sí, espectacular también en defensa: 4 robos y 4 tapones (máximo del partido).
El alero, la
bestia Dominique
Wilkins.
29 puntos para este matador que tanto nos hizo querer este deporte.
El otro jugador alero o ala-pívot o lo que quisiese ser (dominaba
demasiadas facetas del juego como para clasificarlo únicamente en
una de ellas).... Larry
Bird, con
una actuación un “tanto” floja de 6 puntos, 7 rebotes y 4 robos.
Por último, el pívot, el poco hablador Moses
Malone:
7 puntos y 9 rebotes. En definitiva: un quinteto lleno de campeones y
escaparate del Hall of Fame.
El banquillo
sirvió para que jugasen el buen escolta tirador Danny
Ainge
(3 de 4 en triples para un total de 12 puntos), el jamaicano Pat
Ewing (9 puntos y 6 rebotes), el base de Atlanta, Doc
Rivers,
que sumó 9 puntos junto a 6 asistencias. También se sumaron a la
fiesta el elegante y fino pívot de Cleveland Brad
Daugherty
(12 puntos), el excéntrico sixer Charles
Barkley
(4 puntos y 3 rebotes), el céltico Kevin
McHale
(2 puntos) y Maurice
Cheeks,
de Philadelphia (que no anotó en los 4 minutos que estuvo en pista).
El Oeste tenía de base a Magic Johnson. 39 minutos (demasiados para un partido All-Star), aunque bien merecidos porque repartió 19 asistencias, sumó 17 puntos y capturó 6 rebotes. Le acompañaba en la posición de base-escolta Fat Lever, de Denver, igual de desconocido para algunos como jugador todo-terreno, capaz de promediar esa temporada, atención: 18,9 puntos, 8,1 rebotes y 7,8 asistencias. Lever terminó el partido con 17 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias.
El Oeste tenía de base a Magic Johnson. 39 minutos (demasiados para un partido All-Star), aunque bien merecidos porque repartió 19 asistencias, sumó 17 puntos y capturó 6 rebotes. Le acompañaba en la posición de base-escolta Fat Lever, de Denver, igual de desconocido para algunos como jugador todo-terreno, capaz de promediar esa temporada, atención: 18,9 puntos, 8,1 rebotes y 7,8 asistencias. Lever terminó el partido con 17 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias.
El alero,
poeta y también jugador de Denver Alex
English
aportó 10 puntos. Karl
Malone dejó
más que su sello en el partido con 22 puntos y 10 rebotes en el
juego interior. El nigeriano y después americano Hakeem
Olajuwon mostró
su clase y
se
fue hasta los 21 puntos (8 de 13 en tiro) y 9 rebotes (7 ofensivos).
El banquillo
no tuvo demasiados minutos, por decisión de Pat Riley, entrenador
del Lakers. El ágil Clyde
Drexler aprovechó
sus 15 minutos (el que más de la segunda unidad) para aportar 12
puntos y 5 rebotes. El mítico laker Jabbar
consiguió
10 puntos y 4 rebotes. Su compañero de equipo James
Worthy 4
puntos; el cuadrado Xavier
McDaniel, aunque
sí que estuvo, no tuvo su día
(2
puntos, 1 de 9 en tiro). Por su parte Mark
Aguirre
venía de Dallas para aportar 14 puntos en 10 minutos. El escolta,
excelente ladrón de balones y presidiario spur Alvin
Robertson se
quedó en 2 puntos. El maverick James
Donaldson sumó
2 puntos y capturó 6 rebotes en apenas 8 minutos.
Resultado
final: Este 138, Oeste 133. Jordan
se
quedó a dos puntos de la máxima anotación en un partido All-Star
(en posesión de Wilt Chamberlain
con
42 en 1962, lo que no le valió para ser el MVP de aquel partido). Un
All-Star donde se pasaba mucho el balón (una lección que podría
aprender Kobe
Bryant),
donde reinaba el juego de pies (Olajuwon,
McHale, Worthy),
con lanzadores fiables, matadores,... de esos partidos nostálgicos
que crean escuela.
Aunque
parezca difícil de superar, la fiesta del basket se completó con la
celebración el día anterior del concurso de triples. Y ganó Larry
Bird
(participaban Danny
Ainge,
Dale
Ellis,
Michael
Cooper...).
El de mates, con Michael
Jordan venciendo
en el último mate (con cierta polémica, por cierto, ingrendiente
indispensable para el recuerdo) a Dominique
Wilkins.
Michael, por favor, vuelve con 50. Y ojalá firmaras la mitad de lo que hacías con 25. Aunque únicamente fuese un partido.
Mates de calidad es sinónimo de espectáculo |
Larry Bird ganó los tres primeros concursos de triples de la NBA |
Michael, por favor, vuelve con 50. Y ojalá firmaras la mitad de lo que hacías con 25. Aunque únicamente fuese un partido.
Àngel Asensi Esteve.
Periodista.