Una pregunta que yo mismo es la primera vez que me planteo. Quizá porque no hace falta comparar cuando hablamos de excelencias musicales, aunque estén cubiertas de una sencillez aparente. Está claro que lo que entra por los ojos envuelto de cine, muchas veces acaba convirtiéndose en un himno. Y cómo no, en estas cuestiones, Hollywood y
Silvester Stallone -siempre criticado por sus interpretaciones-, suelen acertar.
La canción
"Evey of the tiger" es un clásico. Una verdadera joya que, incluso con el desgaste de las necesarias audiciones para ser un clásico, sigue sonando, dentro de lo que cabe, interesante y fresca.
Survivor es una banda americana. Rock con fundamento clásico que, en principio, sigue patrones más o menos estándares para vender y seguir vendiendo en los EE.UU.
"Eye of the tiger" se radió prácticamente por todas las emisoras decentes del mundo. Era el 1982, año del Mundial de Fútbol y fue una elección directa de
Silvester Stallone. Se tradujo como
"La mirada del
tigre", un consejo que siempre le daba Apollo a su discípulo,
Rocky Balboa. "It's the eye of the tiger/It's the thrill of the fight/Rising up to the challenge of our rival/And the last/ known survivor Stalks his prey in the night/And he's watching us all/with the eye of the tiger". ("Es la mirada del tigre,/es el estremecimiento de la pelea,/levantándose ante el reto de nuestro rival./Y el último superviviente conocido/acecha a su presa en la noche,/y nos está mirando a todos nosotros,/con la mirada del tigre").
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Apollo pasó de rival a entrenador de Rocky |
Reino Unido, Australia, Irlanda o la casi siempre prestigiosa lista del Billboard Hot 100 aplaudieron al unísono esta composición. Para mi gusto encajaba perfectamente en el film, un gesto de superación constante y una musicalidad más que aceptable. Sin el trampolín de ser banda sonora, este tema no hubiese sido tan popular, pero a los que nos gusta rebuscar entre vinilos, lo hubiésemos encontrado. Y atención, que el grupo no abusó de una postrpoducción exagerada, ni de coros irreproducibles en directo... Una canción en la que no se dobla por ejemplo la voz y se huye de experimentos comerciales. Un gran tema, con un riff de guitarra recordado, con algún cambio de ritmo en la batería y sin punteo... tomen nota los artistas y más aún, los productores, los empeñados en maquillar músicos y en idear temas que suenan a plástico o a chicle.
La visión del rock norteamericano fue un acierto por parte de
Stallone, pero también hubo un "qué pudo pasar". Algunos críticos y biógrafos señalan que el artista estuvo dudando hasta el último momento porque también tenía otra propuesta. Esta vez, venía desde el Reino Unido.
"Another One Bites the Dust" (traducido como
"Que otro muerda el polvo", tema interpretado, compuesto y producido por
Queen
en 1979, tenía su atractivo. Una línea de bajo (pa-pa-pam-pam-pam...pa-pa-pa-pa-pa-paaa) puesta al servicio de los americanos (este single fue el más vendido del grupo en Norteamérica, sobretodo en la América Negra), era todo un atractivo también para Hollywood.
Un tema con ritmo, con una interpretación vocal extraordinaria y sin abusar de diversos registros. Un tema, en definitiva, que podía haber ido directamente al ring.
"There are plenty of ways that you can hurt a man/ and bring him to the ground/you can beat him/ you can cheat him/ you can treat him bad and leave him/you can treat him bad and leave him/when hes down/but I'm ready for you/I'm stangind on my own two fleet/out of the dorrway the bullets rip/ repeating to the sound of the beat"/. Hay muchas maneras de lastimar a un hombre/ y dejarlo en el suelo. Puedes golpearlo/puedes engañarlo/puedes tratarlo mal y dejarlo/cuando está abajo./ Pero estoy listo, si estoy listo para ti/ estoy parado en mis dos pies/ fuera del umbral las balas desgarran/repetiendo el sonido de un latido/.
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Queen interpretando el tema |
Stallone escogió
"La mirada del tigre"... y acertó. Aunque a nadie le hubiese importado escuchar mil veces
"Que otro muerda el polvo" si se trata de un combate en lo más alto de las listas de ventas... y con
calidad.
Miquel Asensi Esteve
Periodista